Sucesión Testamentaria
En California, sucesión testamentaria o "Probate" en ingles, es el proceso judicial en el cual los activos de un difunto se distribuyen a sus beneficiarios o herederos. Generalmente, sucesión testamentaria es necesaria cuando el difunto fallece intestado (sin testamento) o con un testamento. El proceso de sucesión testamentaria puede demorar desde 9 meses a un año y medio o más (depende de la complejidad del patrimonio). Los honorarios de Probate son fijados por la ley de California y se basan en el valor bruto del patrimonio en la siguiente forma:
cuatro por ciento (4%) en los primeros cien mil dólares ($100,000); y
tres por ciento (3%) en los próximos cien mil dólares ($100,000), y
dos por ciento (2%) en los próximos ocho-cientos mil dólares ($800,000); y
uno por ciento (1%) en los próximos nueve millones de dólares ($9,000,000)
Por ejemplo, un patrimonio compuesto de una casa valuada en $1,000,000 resultará en honorarios para cada uno de los abogados y administradores de $23,000 para un total de $46,000.
Similar a la administración de un fideicomiso, el albacea testamentario o el administrador de un patrimonio está sirviendo una función fiduciaria y está sujeto a obligaciones legales y responsabilidades bajo la ley de California. Por consecuencia, apoyo y orientación jurídica adecuada se recomienda asegurarse de que el albacea o administrador cumpla sus obligaciones fiduciarias y administre el patrimonio de una manera eficiente.